
La Luz de la Estela

¿A dónde vamos dulce estrella?
Rey y Mago la sigo a ella.
Inmutable, incuestionable y bella.
Me guía siempre hacia el final.
Yo te sigo, tu fiel creyente.
Con mi estrella siempre al frente.
Tu luz me ciega, imponente,
con una belleza sin igual.
Entre el blanco de tu destello,
diviso la silueta de algo bello,
impaciente irgo el cuello,
y veo

"La luz de la Estela" fue el último poema que escribió Plíneo antes de su prematura muerte en 1963. El poema, anotado en un cuaderno que tenía Plíneo consigo en el accidente, fue descubierto y publicado 4 años después de su muerte por su hermano Rómulo, en un poemario de poemas sin publicar titulado "Poesía interminable de Plíneo Vargas".
El poema nunca fue terminado, y Rómulo decidió dejar la oración que Plíneo dejó a medias para simbolizar lo repentina y temprana que fue su muerte.
